El encuentro aeronáutico más grande del mundo se
clausuró el pasado Domingo 23 de Junio en una atmósfera de euforia. Por un
lado, se presentaron en sociedad nuevos modelos de aeronaves como el Airbus
A350, que realizó su primer vuelo de prueba con éxito, y el B787-10 de Boeing,
que con su mayor capacidad de pasajeros aspira a hacerse con el mercado de
medio recorrido.
Por otra parte, Le Bourget
se convirtió una vez más en el escenario de la eterna confrontación entre
Airbus y Boeing, donde cada uno de los colosos aeronáuticos exhibieron sus
cifras de ventas: nada menos que 442 pedidos para Boeing (66.000 millones de €
en ventas) y 466 para Airbus (68.700 millones de €), cerrando uno de los
capítulos más reñidos de este duelo de titanes.
Amén de eso, la aviación
militar también estuvo presente, con demostraciones espectaculares a cargo del
avión militar de carga A400M y el caza ruso Shukoi SU-35, que exhibió su
capacidad de maniobra sobre los cielos de Paris.
En cualquier caso, lo
concurrido de la cita (más de 2000 expositores pasaron por los salones de Le
Bourget este 2013) unida a la cantidad y volumen de los pedidos y tratos
cerrados, vuelven a confirmar una vez más que el mercado aeronáutico se
encuentra en uno de sus mejores momentos.
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